5.4.2 Limitar el uso de la amalgamación mediante la optimización de la concentración gravimétrica
El punto de partida para el trabajo de campo con mineros pequeños es la optimización de sus procesos de concentración gravimétrica.
Esto es especialmente importante porque antes de introducir nuevas técnicas desconocidas, los pequeños mineros prefieren mejorar lo que ya tienen y conocen. Sin duda, las pérdidas más altas de mercurio ocurren en el circuito abierto y ocurren cuando el equipo de concentración gravimétrica es insuficiente. Por esto, hay que poner la máxima atención en el mejoramiento de los métodos gravimétricos, que nos permitan obtener concentrados de alta ley, aptos para la amalgamación en circuito cerrado o también para la fundición directa. Mientras los mineros no estén absolutamente convencidos de que sus procesos gravimétricos funcionan excelentemente, la tentación de poner el mercurio al molino o en la canaleta seguirá presente.
La concentración gravimétrica ha sido y sigue siendo el método de procesamiento más importante en la pequeña minería. En la concentración gravimétrica, la diferencia en peso específico entre el mineral valioso y los minerales ganga es utilizada para alcanzar su separación. Esta separación se lleva a cabo en los diversos movimientos de las partículas de los minerales pesados (en nuestro caso, oro, sulfuros auríferos o arenas negras) y los minerales ganga, bajo la influencia de la fuerza de gravedad y otras fuerzas en un medio fluido - por lo general agua o aire. Una característica de todos los métodos de concentración gravimétrica es que las partículas tienen que ser separadas por la dinámica del flujo, para lograr la formación de capas o cejas de minerales livianos y pesados.
La Tabla 16 muestra una comparación esquematizada de procesos con y sin amalgamación en operaciones típicas.
TABLA 16
COMPARACIÓN ESQUEMATIZADA DE PROCESOS CON Y SIN AMALGAMACIÓN EN
OPERACIONES TÍPICAS
Existen pocas fuentes de información sobre técnicas gravimétricas de procesamiento en su primer periodo, sin embargo, sabemos por la leyenda del "vellocino de oro" que se utilizaban las pieles de oveja para recuperar oro aluvial de manera muy similar a las alfombras utilizadas hoy en día en operaciones pequeñas de minería aluvial. Los antiguos egipcios usaron los predecesores de las canaletas y las bateas para recuperar oro de los sedimentos de los arroyos en épocas tan antiguas como el 2.000 A.C. Georgius Agrícola describe una variedad de artefactos de concentración gravimétrica utilizados en 1556 que se siguen utilizando el día de hoy, tales como diferentes tipos de mesas y canaletas (66).
La mejora de técnicas de concentración gravimétrica siempre ha sido un reto para varias generaciones de mineros e ingenieros, y un gran número de diferentes artefactos ha sido desarrollado a través de los años, y sin duda continuarán siendo desarrollados otros más. Algunos no han pasado de la etapa experimental, pero la investigación científica y las constantes pruebas a base de eliminación de errores llevaron a una mejora constante de dichas técnicas; así por ejemplo, la introducción de equipo recientemente desarrollado como los concentradores centrífugos, los cuales son sometidos a constantes mejoras y de los cuales cada año aparecen nuevos modelos en el mercado.
La concentración gravimétrica es una manera sencilla, de alta capacidad, sin reactivos peligrosos, y al mismo tiempo de bajo costo y de una eficacia razonable, para separar minerales pesados valiosos de la carga bruta, lo cual explica su extenso uso en la pequeña minería aurífera.